Anuradha Ghandy

 

"¡La guerra popular ha hecho añicos las vacilaciones de las mujeres de Dandakaranya!"

Entrevista concedida a Poru Mahila, órgano de Krantikari Adivasi Mahila Sangh

 

 


Fecha: Antes de marzo 2001.
Publicado por vez primera:  En Poru Mahila, órgano de Krantikari Adivasi Mahila Sangh [Organización de Mujeres Revolucionarias Adivasis] (KAMS) de Dandakaranya, marzo de 2001.
Traducción al castellano: Gran March Hacia el Comunismo, marzo 2013.
Fuente del texto: Blog GranMarchaHaciaelComunismo, 2013.


 

 

Poru Mahila: Camarada Janaki, ¿podría explicarnos la opresión a que se enfrenta la mujer urbana?

Camarada Janaki: Aunque todas las mujeres en la India se encuentran bajo la opresión feudal, capitalista, imperialista y patriarcal, ésta aparece en varias formas en áreas distintas, las áreas urbanas y las rurales. Las mujeres de la clase obrera y las mujeres de la clase media en las zonas urbanas tienen algunos problemas específicos.

En primer lugar, si contemplamos los problemas en el seno de la familia, incluso en áreas urbanas, las mujeres están oprimidas por la cultura feudal.

Aunque la opresión de esta cultura puede resultar menos severa, todavía la mayoría de las niñas y mujeres no gozan del derecho a tomar decisiones importantes en relación con su vida familiar. Las muchachas solteras están bajo la presión de casarse con hombres de la misma casta y misma religión según las decisiones de la familia. Si una muchacha decide casarse con un hombre de su elección de otra casta o religión, se verá sometida a una gran presión. Se enfrentará a una severa oposición por parte de la familia. Incluso si una mujer desea trabajar fuera del hogar, necesitará tener el permiso del padre, hermano o marido. A algunas personas de castas y religiones (por ejemplo, los musulmanes y kshatriyas) no le gusta que sus mujeres trabajen. Por lo tanto se convierte en inevitable para las mujeres luchar incluso por su independencia económica.

Además, desde que los valores capitalistas se han extendido ampliamente, las relaciones hombre-mujer también se han comercializado y las mujeres se enfrentan a graves problemas. La dote y otros artículos que deben darse a la familia del novio antes y después del matrimonio, se ha convertido en un gran problema para los padres que dieron a luz a niñas. Además, se hizo común en todas las comunidades acosar a las mujeres por la dote tanto física como mentalmente. Cuando la vida de la esposa se puede medir en dinero y oro, matarla en beneficio propio no queda muy lejos. Esta terrible situación se puede encontrar en muchos hogares en las zonas urbanas de hoy día. Especialmente en los últimos 25-30 años, quizás sea la India el único país donde el nuevo crimen de quemar novias por la dote se ha convertido en una moda.

Una cosa que tenemos que observar es que una parte de las mujeres que pertenecen a la clase trabajadora y de las clase media no reciben la oportunidad de salir y conseguir un trabajo. Todo su tiempo lo emplean en trabajo de la casa y trabajar para la familia. Como resultado, dependen de otros para su subsistencia. Socialmente ellas dependen  de sus maridos. Esa es la razón por la que no tratan de hacen nada independiente. Existen tantas restricciones para ellas para tomar iniciativas o dar un paso fuera del hogar. Y si echamos una mirada a las mujeres que cuidan de los estudios de sus hijos, es casi como una máquina. Todo su trabajo gira en torno al marido, los estudios de los hijos  y enviarlos a clase.

Las condiciones de la clase obrera en las zonas urbanas son lamentables. La principal razón es la gravedad del problema de no tener un lugar donde quedarse. Así, los pobres se ven forzados a montar casas ilegales en lugares abiertos. Muchos de ellos construyen una choza al borde de las carreteras, vías de ferrocarril y alcantarillados (incluso encima de las alcantarillas). En estrechas sendas, y a los lados de las carreteras, centenares de familias viven levantado chabolas. No existe ni siquiera un milímetro de espacio para construir un baño o un lugar que se pueda llamar patio.

Como las ciudades van extendiéndose, las barriadas pobres continúan aumentando al borde de las carreteras y en las pequeñas colinas dentro de la ciudad. Carecen de retretes o instalaciones de agua. Entre aglomeraciones de personas, un medio ambiente contaminado, y falta de las comodidades básicas, las mujeres hacen su trabajo enfrentándose a todos estos problemas. La lucha por el agua es muy habitual. En chabolas como estas las mujeres sufren el problema de verse acosadas. Pero por encima de todo el principal problema es la demolición de estas chabolas por las autoridades municipales y gubernamentales alegando que son ilegales. Generalmente recae sobre las mujeres oponerse a estas demoliciones. Porque cuando los funcionarios acuden de día con la policía y las bulldozers, son generalmente las mujeres y los niños los que están en casa. El sistema capitalista no reconoce el derecho a tener un hogar como un derecho básico.

Las mujeres en las zonas urbanas tienen muchas oportunidades para salir de casa y trabajar. Consiguen empleos en fábricas, oficinas, escuelas, hospitales y tiendas. Pero en muchos trabajos no reciben el mismo salario que los hombres. O los salarios son tan bajos que no pueden llevar un hogar con él.

Muchas mujeres de  la clase obrera trabajan en la industria de la construcción sometidas a los patronos. Muchas mujeres trabajan como sirvientas. Todos estos trabajos recaen bajo el sector precario. No gozan de ninguna garantía en el trabajo ni garantía en el salario.

Además, tienen que enfrentarse al acoso de los patronos y los hombres bajo quienes trabajan. Esto se produce de muchas maneras. No sólo las mujeres de la clase obrera sino incluso mujeres de la clase media con educación se enfrentan a un acoso así. Las mujeres se ven acosadas con tácticas de gran presión como amenazas de despedirlas, no dándoles trabajo, transfiriéndolas, escribiendo comentarios negativos en sus expedientes, etc. Muy pocas mujeres son capaces de compartir tales asuntos con otros.

Hoy día, en las grandes ciudades, las industrias de electrónica de los imperialistas han surgido a gran escala. En muchas de ellas son empleadas muchachas. Pero los problemas de más trabajo, menos salarios y prohibición de organización están presentes en estas industrias. Así pues, tienen que luchar incluso por el derecho básico de crear sindicatos.

En el pasado, algunas industrias de confección de beedis (cigarrillos indios) y agarbatti (palitos de incienso) crecían en los hogares. Ahora incluso muchas nuevas compañías están dando la mayor parte del trabajo para que se haga en casa. Las esposas pobres toman estos empleos pensando que pueden ganar un poco más trabajando en casa. Existe una gran explotación en este trabajo. Incluso si trabajan todo el día con la ayuda de miembros de su familia, es difícil para ellas ganar siquiera veinte rupias (30 céntimos de euro aproximadamente). La fuerza laboral de las mujeres pobres se paga menos incluso. Lo que quiero decir es que se las explota enormemente.

Finalmente, otra cuestión es la influencia de la cultura imperialista, muy grande entre las mujeres de las ciudades. No sólo están influidas por el consumismo sino que además son víctimas de él. Esto aumenta día tras día. En lugar de valores humanos están dando más importancia a la belleza y los productos de belleza. Como resultado, existe un ambiente de inseguridad debido a las atrocidades y acoso en las zonas urbanas. Las mujeres jóvenes se enfrenta a un sentimiento de inseguridad a la hora de salir de casa. En la vida en las ciudades, las mujeres sufren de muchísimos problemas como estos, Pero existen muy pocas organizaciones que luchen contra ellos en la actualidad.

 

Po.Ma: Háblanos de las distintas corrientes en el movimiento de la mujer.

Camrada Janaki: Hacia los años 80 hubo un estallido espontáneo del movimiento de la mujer en muchas partes del país, especialmente en las ciudades. Este movimiento fue una indicación de la creciente conciencia democrática y antipatriarcal entre las mujeres. Después que el movimiento de Naxalbari propinara un duro golpe al sistema semifeudal y semicolonial en la India, hubo un estallido de los movimientos de la clase obrera y de los estudiantes y se produjo el Estado de Emergencia y las crisis sociales, económicas y políticas de las clases dominantes. El movimiento de la mujer brotó en este escenario.
A nivel internacional existió también la influencia de los movimientos de mujeres y estudiantes. Principalmente las mujeres estudiantes, de clase media y profesionales participaron activamente en estos movimientos. Fuera de estos movimientos democráticos espontáneos, también nacieron muchas grandes y pequeñas organizaciones de mujeres. Pero en los asados 20 años ha habido muchos cambios en el movimiento de la mujer, su carácter político y en el de estas organizaciones. Posteriormente, el movimiento de liberación de la mujer dependiente de las mujeres de clase media de las ciudades se escindió en varias corrientes políticas e ideológicas. En los movimientos nacionales, especialmente en la lucha de Cachemira por su autodeterminación, la participación activa de las mujeres ha aumentado considerablemente. Las mujeres están jugando un papel prominente en denunciar las atrocidades inhumanas de la policía y el Ejército.

Bajo la dirección del Partido, el movimiento revolucionario de las mujeres se ha desarrollado mucho en las zonas rurales, especialmente en Dandakaranya y Telengana Norte. Incluso los partidos BJP y RSS han reconocido la fuerza de las mujeres y están prestando atención a difundir valores sociales decadentes y una política depravada entre ellas.

Muchas mujeres que habían participado espontáneamente en los movimientos contra los asesinatos por causa de dote, el sati (el rito de quemarse una mujer en la pira de su marido) y los acosos, atrayendo la atención de la nación hacia dichos problemas, se alejaron del movimiento. Pero muchas otras se han ganado un nombre por sí mimas tanto en la India como en el extranjero como investigadoras e ideólogas sobre asuntos de las mujeres. Muchas de ellas fundaron organizaciones de voluntarios (ONGs). Están recibiendo fondos de agencias internacionales para el estudio y emancipación de la mujer.
Pero tienen un punto de vista feminista y una ideología feminista. Ahora se han convertido en propagandistas para el feminismo, en el sentido de que el patriarcado es el principal problema de las mujeres, de que tenemos que luchar sólo contra el patriarcado. Pero el patriarcado tiene sus raíces en la sociedad de clases. En todas las sociedades es perpetuado por las clases explotadoras, es decir, el feudalismo, el capitalismo y el imperialismo. Así pués, luchar contra el patriarcado significa luchar contra las clases explotadoras. Pero las feministas están en contra de reconocer esto. Piensan que las condiciones de la mujer en esta sociedad se pueden cambiar a través de la presión (lobby) con los gobiernos y a través únicamente de la propaganda. En realidad, hoy, esta corriente feminista representa el punto de vista de clase y los intereses de clase de las mujeres de la burguesía y clase media alta del país.

Las organizaciones de mujeres de los partidos revisionistas como el PCI, PCM y Liberación están trabajando activamente en algunas ciudades. Dirigen movimientos sobre temas sociales y políticos de la mujer. Junto con temas sobre opresión de la mujer, incluso llevan a cabo marchas y dharnas (sentadas) sobre problemas como alzas de los precios, etc. Son diferentes de la corriente feminista, porque no sólo dan importancia a las luchas contra el patriarcado. Pero son igualmente organizaciones completamente reformistas.

Debido a su política revisionista, no ligan la liberación de la mujer con la revolución y trabajan con la creencia de que cambiando gobiernos serán capaces de mejorar las condiciones dentro del mismo marco social actual. Por ejemplo, durante los pasados dos, tres años, han concentrado todas sus actividades en obtener el derecho de reservar el 33 por ciento para las mujeres en el parlamento. De hecho, hace mucho tiempo que el pueblo común ha perdido confianza en el corrupto sistema parlamentario. También se ha demostrado que quienquiera que sea elegido al parlamento siempre servirá a las clases dominantes explotadoras y no trabajará por los derechos de la mujer o los del pueblo pobre.

Existen algunas organizaciones en las zonas urbanas que están trabajando activamente basándose en análisis marxistas, viendo las raíces de la explotación y opresión de la mujer en la sociedad de clases y reconociendo el vínculo entre la liberación de la mujer y la revolución social. Desde hace una década han estado trabajando entre mujeres de la clase obrera, estudiantes y empleadas. Especialmente están trabajando muy activamente en Andhra Pradesh y Karnataka. No sólo están afrontando movimientos contra la opresión de la mujer y otros problemas, sino también haciendo extensa propaganda entre las mujeres sobre sus derechos y sobre la explotación y opresión que se perpetúa sobre ellas.

Es un fenómeno alarmante para los movimientos democráticos y revolucionarios de mujeres que las fuerzas Hindutva (literalmente “calidad de hindú”) estén también trabajando entre las mujeres. Están restableciendo viejos valores feudales en nombre de oponerse a la cultura occidental. En nombre de las tradiciones hindúes y Bharat Mata (Madre India) están suprimiendo la creciente conciencia de las mujeres. No sólo eso. Están llevando a cabo entre ellas una propaganda perversa contra las minorías regionales. Incluso les están dando entrenamiento militar en nombre del Nari Shakti (Poder Femenino).
En resumen, el movimiento de la mujer está dividido en varias corrientes ideológicas por todo el país. Debemos estudiarlas y construir un fuerte movimiento de la mujer contra las corrientes erróneas en su seno.

 

Po.Ma:  ¿Cuánto conocen las personas que no están dentro de él sobre el movimiento revolucionario de la mujer? ¿Cuál es su impacto?

Camrada Janaki: El movimiento de mujeres adivasis que surge en Dandakaranya  desde la última década  tiene una enorme prominencia en la historia del movimiento contemporáneo de la mujer en la India. El vigor e iniciativa de las mujeres de Cachemira es mayor que en otras partes del país. Miles de mujeres están saliendo a las calles oponiéndose a la cruel represión del Ejército y a todas las formas de atrocidades. Después del activismo político de las mujeres de Cachemira, son las campesinas adivasis de Dandakaranya las que están jugando un activo papel social y políticamente. Están organizadas a gran escala en gran número de aldeas. Se están oponiendo a las viejas tradiciones patriarcales dentro de la sociedad adivasi Gond.

Ellas están participando en la lucha armada contra el Gobierno explotadore y su Ejército y en campañas políticas. Esta es una gran victoria de la Krantikari Adivasi Mahila Sanghatan (KAMS) [Organización de Mujeres Revolucionarias Adivasis].

Pero es muy triste que haya tan poca información fuera disponible sobre la extensión de la KAMS y sobre sus actividades. Los militantes y simpatizantes del PCI (M-L) (Guerra Popular) en otros estados conocen poco de ella. El Partido ha hecho algunos esfuerzos para ello. El documento escrito para el seminario de Patna (publicado en Telegu e Hindú), el libro sobre las mujeres mártires y algunas historias y relatos breves ayudaron a su propagación. Pero la información sobre este movimiento revolucionario de mujeres no aparece con regularidad. Incluso vuestra revista “Poru Mahila” se puede leer fuera muy raramente. Es necesario planificar su distribución también fuera de las zonas del movimiento.

No obstante, cualquiera que sea la información aunque escasa que reciban las organizaciones democráticas y revolucionarias, están muy entusiasmadas sobre ella. Están siendo influenciadas por la determinación y coraje desarrollado por las mujeres adivasis. Es muy necesaria la más extensa propaganda sobre la KAMS y sus actividades. A través de ella, podemos dar una adecuada respuesta a la negativa propaganda gubernamental sobre el enfoque de los partidos revolucionarios en cuanto a la cuestión de la mujer.

 

Po.Ma:  Cuéntanos sobre tu experiencia en Dandarankaya

Camarada Janaki: Antes de venir a Dandarankaya leí artículos e informes sobre el movimiento de la mujer aquí. Pero no tenía una valoración de que fuera tan extenso. Esa es la razón por la cual me alegró ver el tamaño de este movimiento. Tengo que decirte algo. En las lecciones que enseñan sobre en los colegios sobre las sociedades tribales, dicen que la sociedad Gondi es muy liberal. Peo después de observar de cerca a los pueblos Muria, Madia y Dorla comprendí cuan patriarcal era también la sociedad tribal. Comprendí cuando importante es estudiar con profundidad el problema de la opresión de la mujer. Aunque la participación de las campesinas adivasis en el proceso de producción es enorme, el patriarcado ha frenado sus derechos.

Mientras escribía sobre el movimiento de la mujer durante la guerra por una sociedad de nueva democracia en China, Jack Beldon, el escritor y periodista norteamericano escribió: “El Partido Comunista de China tiene la llave para la victoria de la revolución. Se han ganado al sector más oprimido de la sociedad china”. Cuando vi el movimiento de la mujer en Dandakaranya, fueron estas palabras de Beldon las que vinieron a mi mente. De hecho, tras la Revolución china, ha sido el movimiento revolucionario en Dandarankaya que ha demostrado que donde existe una guerra popular, donde tiene lugar una lucha armada contra el sistema feudal, comprador, imperialista para la victoria de la Revolución de Nueva Democracia, las mujeres de la clase trabajadora participan activamente e gran escala para la emancipación de toda la sociedad al igual que por su propia emancipación.

La Guerra Popular ha hecho añicos las vacilaciones de las mujeres. Ha doblado su fortaleza. Ha mostrado el camino para la liberación de la mujer. Existe un vínculo entre la sociedad semifeudal y semicolonial y la opresión de la mujer. Se ha demostrado una vez más por esta victoria del Partido en Dandarankaya que es correcto el principio marxista de que podemos llevar adelante la lucha contra el patriarcado solamente con la lucha para poner fin a este sistema.

Allí donde el Partido está trabajando sistemáticamente, podemos ver que la participación de la mujer es mayor en todas las actividades y movimientos políticos. En 1998, debido a las graves condiciones de hambre en Bastar Sur, muchas mujeres emigraron a Andhra Pradesh para trabajar por un salario diario. También había entre ellas miembros del comité de la KAMS. Pero cuando les preguntamos que vinieran a las reuniones del 8 de marzo, en un lugar asistieron 700 y en otro 450. Anteriormente en concentraciones contra las condiciones de hambre habían participado miles de ellas. Cuando estuve allí hubo mujeres reclutadas al Ejército Guerrillero Popular a gran escala. En algunos lugares el reclutamiento de muchachas jóvenes fue mayor que el de jóvenes muchachos.

Lo que más me influyó fue que las esposas de los camaradas casados que ya formaban parte de los escuadrones también estaban siendo reclutadas. Muchas de ellas incluso habían dejado sus pequeños con sus familiares y se están convirtiendo en combatientes guerrilleras en la gran Guerra Popular en curso para cambiar esta sociedad. Y he visto a muchas camaradas mujeres que se mantuvieron firmes con la Guerra Popular sin mirar atrás incluso después de que pocos meses atrás sus esposos hubieran muerto en encuentros con la policía o en algún otro accidente. Rompiendo con los tradicionales, sombríos y estrechos confines de la familia, les gusta más esta nueva vida pese a estar llena de peligros. De esta manera su vida y su existencia están adquiriendo un significado. He visto a muchas camaradas entrenarse y asumir nuevas responsabilidades.

Creando unidades de la KAMS en cada aldea, la elección de sus comités, la elección de Comités Regionales en conferencias regionales, el envío de miembros de unidades  a aldeas para campañas propagandísticas, la participación en huelgas y otras actividades de protesta, dándoles entrenamiento militar – todas estas son victorias de este movimiento. Pero lo que he observado en mi experiencia es que desde que las miembros de los Consejos Consultivos están involucradas sin descanso en diversos tipos de responsabilidades y debido a algún trabajo de tipo  rutinario, el trabajo de la KAMS está siendo desatendido. Tenemos que penar en nuevos métodos para involucrar a las mujeres más mayores en las aldeas. Las mujeres y sus críos están enfrentándose a un número de problemas sanitarios. Incrementando su conocimiento de estos asuntos y prestando especial atención a su bienestar, podemos aumentar su entusiasmo. Tenemos que aumentar su participación en las reuniones a nivel de aldea. Muchas personas se refieren a la KAMS como una organización de mujeres jóvenes. Ampliando su estrecho conocimiento de la sociedad es otro desafío que tenemos ante nosotros.

Igualmente existe una necesidad de proporcionar una formación especial social y política a las mujeres miembros de los escuadrones y pelotones. Tenemos que planificar el dotarles de una continua educación y conocimientos científicos sobre problemas de salud. Aunque existen discusiones sobre estos temas, se van posponiendo debido a la falta de tiempo y a quedar inmerso en varias labores. Podemos deshacernos de su inferioridad dándoles conocimientos científicos e imbuyendo un amplio pensamiento social entre ellas.

 

Po.Ma:  ¿Cuál es to mensaje a las mujeres que trabajan en los escuadrones y en la KAMS en Dandakaranya (DK)?

Camarada Janaki: Nuestras mujeres camaradas adivasis en DK están hoy construyendo una nueva historia. Aunque es la zona más atrasada del país está a la cabeza en el movimiento de las mujeres que está desarrollándose en el país. Están respondiendo a los fusiles de la policía adecuadamente luchando en plano de igualdad con los camaradas hombres en la lucha armada para liberar a este país de las garras despiadadas del imperialismo, el feudalismo y la burguesía compradora. En las aldeas se están alzando por sus derechos enfrentándose a las amenazas y presiones de los ancianos. Están debilitando el patriarcado en la cultura adivasi Gondi.

Aunque se están oponiendo a enemigos y fuerzas tan grandes, la timidez y sentido de subordinación que están aún presentes, son igualmente grandes enemigos que están obstaculizando su desarrollo. El complejo de inferioridad surge de ellos. Sus raíces son muy profundas. Lo que quiero decir a mis camaradas de la KAMS es que deben incrementar su autoconfianza. Tienen que luchar contra el enemigo en su interior. En los días venideros la KAMS se enfrentará a muchos y grandes desafíos. La represión estatal ya está ahí.

Aparte de eso, el Gobierno tratará de mantener la sociedad y cultura adivasis en el atraso con la ayuda de los ancianos de las aldeas y por medio de los líderes adivasis. Será necesario a la KAMS hacerles frente  políticamente. Igualmente, la KAMS deberá estar lista para exponer sus posiciones sobre la auténtica liberación de la mujer en el movimiento de la mujer que se está desarrollando a través de diversas corrientes en el país. Para hacer frente a todos estos desafíos nuestras camaradas deben alcanzar madurez política e ideológica y tener autoconfianza.